keyboard_arrow_uptop
BP360 is back! Pick up a yearly subscription, 2025 Annual, and t-shirt for one great price!
Image credit: USA Today Sports

Traducido por Carlos Pérez 

He completado ya dos ciclos de listas de prospectos. Una lista de prospectos nacionales en realidad no es nada que venga con un manual de instrucciones industrial. Todos tenemos nuestros propios procesos y predilecciones. He remarcado varias veces que me arrepiento de algunos rankings 24 horas después de cerrar mis listas. El número y las particularidades de los tipos varía con el tiempo, pero un año después de completar mi primera lista parece que hay un pequeño problema. Mis mejores brazos aparecen haber rendido por debajo de lo esperado. Así que quiero considerar mi lista de 2017 una vez más para ver cómo hemos llegado hasta aquí y qué o qué no he aprendido desde entonces.

1. Alex Reyes

Por qué está aquí

Reyes tenía el mejor arsenal de todos los pitchers en las menores al comienzo de la temporada 2017: una bola rápida de 80 puntos -velocidad de tres dígitos con movimiento- y dos potenciales secundarios sobresalientes en su curva y su cambio de velocidad. Ya había lanzado 44 buenas entradas en ligas mayores. Todo pintaba bien hasta entonces, y Reyes se encontraba muy cerca de conseguir un puesto en el equipo de grandes ligas. Muchas fuentes del equipo me decían que lo consideraban un OFP 80. Yo no iría tan lejos -eso era ser muy conservador- pero estaba muy cómodo con la afirmación de que Reyes era el mejor prospecto de pitcheo del béisbol. El debate sobre el mejor prospecto general estaba un poco más encendido, pero se ubicaba en el número uno rápidamente en el proceso y se quedaba allí tras cada llamada telefónica y conversación por email.

¿Qué pasó?

Reyes llegó a Júpiter y se descubrió que su UCL se rompió. Esto es algo que sucede. También sucedió el día después de que publicáramos nuestra lista de 101 prospectos en la página web. Eso fue gracioso.

¿Qué aprendí?

Como dice mi gran amigo, Toby Hyde: los pitchers se rompen, eso es lo que hacen.

¿Me arrepiento?

En realidad, no. Uno podría argumentar que el Reyes de 2017 debería ser el ejemplo más claro de por qué no deberíamos poner a un prospecto de pitcheo en el número uno global. Creo que hay una idea equivocada sobre el proceso de elaborar nuestra lista, y se piensa que hay una salsa secreta o un anillo descodificador. Honestamente, no hay tanta consistencia interna como me gustaría. Son solo los 101 tipos que nos gustan más en el día que finalmente cierro la lista para minimizar cuántas conversaciones de chat del tipo “Hey, Jeff” me llegan de Bret mientras mi fecha de entrega del BP Annual va quedando en el espejo retrovisor.

No le dimos a ningún jugador un OFP de 80 el año pasado, pero Reyes fue el que más cerca estuvo para mí. Conocía los riesgos. Y mirando atrás, su principal competencia para el primer puesto se olvidó de batear (Dansby Swanson) o estuvo a un pelo de sufrir una catastrófica lesión (Andrew Benintendi). Los riesgos de los pitchers no son los únicos que importan, incluso si se sobredimensionan comparándolos con jugadores de posición.

¿Quién podría estar en la versión de 2018?

Yo pretendía originalmente que fuera Reyes, un bonito recordatorio de que las antiguas lesiones de pitchers son el mejor predictor de futuras lesiones de pitchers, y nuestra tendencia a infravalorar la incertidumbre sobre recuperaciones de Tommy John, pero entonces Brent Honeywell apareció en el campamento e inmediatamente se rompió su UCL. Esto es algo que sucede, ya sabes, Brent Honeywell.

10. Lucas Giolito

Por qué está aquí

Giolito tenía una expectativa de 1.1 y una bola rápida de 100 mph como amateur. Estaba en los puestos 13, 6, 3 en los años anteriores. Escribí todo un artículo sobre mi ambivalencia respecto a su perfil, pero no pude ignorar los informes de mis predecesores.

¿Qué pasó?

Giolito fue traspasado a los White Sox como el tipo con una etiqueta gigante de “cambio potencial de escenario”. Estuvo bien en Triple-A, y ligeramente bien en el último sorbo de la temporada en el sur de Chicago, pero pareció más un cuarto abridor genérico, con una bola rápida superando las 90 mph y un slider y cambio de velocidad promedio. El repertorio apareció otra vez esta primavera, cuando la esperanza, eh… la primavera, es eterna.

¿Qué aprendí?

Los caminos de desarrollo de un pitcher son menos lineares que los caminos de desarrollo de prospectos más generales. Pero quizá me enfoqué demasiado en viejos informes que no eran mis viejos informes. Creo que también grabamos en piedra el ranking de prospectos final antes de que la carrera profesional sea el punto de partida de su expectativa en grandes ligas. La proyección también ocurre en las mayores.

¿Me arrepiento?

¿Tal vez? Giolito ha parecido más un brazo de lo alto de la rotación esta temporada que nunca, aunque con un repertorio diferente al que se habría esperado viniendo de Harvard-Westlake. Don Cooper es un mago, y eso es difícil de predecir. Según su actuación en 2016 -e incluso en la mayor parte de 2017- quizá hayamos estado muy lentos a la hora de quitarle su gran expectativa, incluso aunque si esa expectativa termina siendo acertada.

¿Quién podría ser la versión de 2018?

No hemos tenido un pitcher OFP 80 -mucho menos cinco- desde Giolito (aunque Jarrett Seidler argumentó en favor de Sixto este año). Así que en lugar de eso miraremos hacia un pitcher que se debate entre un estatus de amateur/semiprofesional mientras su repertorio puede ser su punto débil. No estoy especialmente preocupado, pero tendré un ojo puesto en la recta de Kolby Allard este año.

14. Tyler Glasnow

Por qué está aquí

Glasnow tenía una rutina potencial de dos lanzamientos -la recta y una curva de martillo-, un historial de dominar las ligas menores a pesar de sus problemas de dirección y control, y algunas apariciones de ligas mayores en su cinturón. Escribí otro artículo acerca de mi ambivalencia sobre su perfil.

¿Qué pasó?

Bromeábamos a nivel interno sobre el número de tipos que si mejoraran un poco su control serían buenos abridores de grandes ligas. Si Glasnow mejorara un poco su control sería un brazo monstruoso. Todavía estamos esperando. Ha dominado Triple-A (una vez más), ha tenido dificultades para sacar strikes o buenos strikes en las mayores (una vez más), y fracasó en su intento de obtener un espacio en la rotación durante el campamento de este año.

¿Qué aprendí?

Los caminos de desarrollo de un pitcher son menos lineares que los caminos de desarrollo de prospectos más generales. Pero quizá me comprometí demasiado con viejos informes que no eran mis viejos informes.

¿Me arrepiento?

Sí, de este sí. Es un análisis post-hoc, pero incluso en ese momento tampoco me encantaba el perfil de Glasnow. No tenía un historial consistente de lanzar strikes, y a pesar de la inhabilidad de los bateadores de ligas menores para hacer frente a su repertorio, las señales de alerta sobre su mecánica eran bastante claras. Las listas son un esfuerzo grupal, pero al final aparece mi nombre en un producto terminado, y si voy a fallar en un tipo, quiero que sea mi fallo.

¿Quién podría ser la versión 2018?

¿Un tipo alto con un gran repertorio y problemas de control que ha sido barrido por bates de ligas menores hasta el momento? Suena a A.J. Puk.

17. Robert Gsellman

Por qué está aquí

De cara a la temporada 2016 tenía a Gsellman como un candidato a ser un buen abridor de la parte baja de la rotación, un típico rol 45, quizá 50. Tenía un gran sinker de 90 mph y una curva muy vistosa que manejaba mejor de lo que uno esperaría. Entonces se salió del cuadro tocando los 90 y pico y mostrando un slider superior. La velocidad aumentó todavía más en la PCL durante el verano y al final de temporada parecía un brazo potencial 70/60/55/50.

¿Qué pasó?

Gsellman lanzó mal y se lesionó. Quizá en ese orden, quizá no. Son los Mets, después de todo. La velocidad bajó a la parte baja de las 90 mph, el slider no evadió los bates, y creo que Marcell Ozuna bateó la mitad de sus jonrones a su costa. Entra en el campamento este año con un dudoso rol de bullpen y como mucho es el séptimo abridor del cuadro de profundidad.

¿Qué aprendí?

Es un sentimiento raro después de haber jugado tanto a estas alturas.

¿Me arrepiento?

“Pero esto me llevó a una gran preocupación. En los periódicos aparecían informes regularmente sobre mis intenciones; no las respondí; escritas por extraños o amigos, que me pedían que me permitieran responderles; y, si aun así me mantuve en mis convicciones y no dije nada, entonces es que pensaban que yo era misterioso, y que un prejuicio existía sobre mí. Pero, lo que fue peor, había un número de corazones tiernos, ansiosos, de los cuales yo no sabía nada en absoluto, que me observaban, deseaban pensar como yo pensaba, y hacer lo que yo hacía, si solo pudieran descubrirlo; quienes en consecuencia se angustiaron tanto que, de manera solemne, no pudieron ver lo que iba a suceder, y que escucharon informaciones sobre mí de esto o aquello, del primer día y del segundo; y sintieron el agotamiento de la espera, y el malestar de la esperanza que se retrasa, y no comprendieron que yo estaba tan perplejo como ellos, y, siendo de una complexión más sensible de mente que yo mismo, enfermaron por el suspenso. Y por supuesto durante ese tiempo me vieron como misterioso e inexplicable.

-Cardenal John Henry Newman, Apologia Pro Vita Sua

Bueno, este último fue definitivamente mi error.

Rescataremos otro ensayo de nuestras listas de 2017.

“Pero si te me acercas el próximo marzo, con el currículum en mano, buscando un trabajo en el equipo de Baseball Prospectus y quisieras remarcar: “sabes, tenía a deGrom como el mejor de la rotación ese año, aquí está mi informe”, no te contrataré. Me pregunto si sabías realmente lo que estabas mirando.

La jugada más razonable habría sido ser un poco más conservador. Darle a Gsellman un brazo 60/55, ponerlo en la mitad del Top 101 -todavía agresivo, pero no tan distanciado del resto de la industria. Una muestra de cautela totalmente justificada, había mostrado su nivel por solo seis meses.

Pero al final es mi nombre en el producto terminado. Y lo tenía como un 7/6.

¿Quién podría ser la versión 2018?

Hay algunos tipos que podrían regresar hacia la media. Corbin Burnes me viene a la mente, así como Alec Hansen, pero las mejores comparaciones con Gsellman son los tipos con listas de prospectos similares en sus páginas de registro de Baseball-Reference. Así que vayamos con Dustin May o Joey Wentz. Al menos así le doy más mordiscos a la manzana.

19. Josh HaderPor qué está aquí

Hader tuvo un año 2016 dominante en los niveles altos de las menores. Continuó con buenas actuaciones incluso en los hostiles confines de Colorado Springs. Había una recta sobresaliente y un slider sobresaliente con un envío de zurdo bastante engañoso para el bateador.

¿Qué pasó?

Los Brewers se sorprendieron a sí mismos con una carrera por el banderín a mediados de junio y necesitaban fortalecer su bullpen. Miraron a Hader y vieron una imitación decente de Andrew Miller. Ahora parece dirigido hacia el bullpen nuevamente, porque planean estar en la carrera por el banderín otra vez.

¿Qué aprendimos?

“Desarrollo de jugadores” está atado a las necesidades de un equipo de grandes ligas. También, tenemos que tener una mejor manera de evaluar prospectos con buenas aptitudes para ser grandes relevos.

¿Nos arrepentimos?

No. Incluso si esto es lo que es Josh Hader, me siento muy cómodo con la calificación que le dimos (y este resultado lo ha demostrado). ¿Hablando estrictamente está “sobrevalorado”? Sí, un poco. Pero si es un 75% de Andrew Miller, estará lo suficientemente cerca de su valoración general y dónde se encontraba en mi ranking.

¿Quién podría ser la versión 2018?

Tiendo a pensar que la mayoría de prospectos de pitcheo son relevos, pero este es un conjunto de circunstancias muy específico: un prospecto de pitcher abridor es llamado para ayudar en el bullpen de un equipo aspirante y se queda allí a medio plazo. Se parece a Justus Sheffield.

Thank you for reading

This is a free article. If you enjoyed it, consider subscribing to Baseball Prospectus. Subscriptions support ongoing public baseball research and analysis in an increasingly proprietary environment.

Subscribe now
You need to be logged in to comment. Login or Subscribe