Traducido por José M. Hernández Lagunes
Spencer Strider, Bravos de Atlanta
En los últimos años, la comunidad de equipos de fantasía ha comenzado a alejarse lentamente de las clasificaciones en favor de los niveles.
Es un cambio que apoyo totalmente. Han pasado años desde que hice algún tipo de lista ordinal de los jugadores, adhiriéndome a ella religiosamente en mis drafts. Tiene mucho más sentido, al menos en mi cabeza, clasificar a los jugadores por posición y agruparlos en categorías, lo que supone una forma rápida y sencilla de ver cuándo sería prudente hacerse con una determinada posición o dejarla si la categoría se ha agotado.
Digo todo esto porque el argumento a favor de centrarse en Strider es que está en un nivel de uno. Alguien, probablemente Gerrit Cole o Corbin Burnes, tiene que ser drafteado como el segundo lanzador titular en cada draft, y en muchos drafts de alto riesgo al menos uno o ambos serán drafteados en la primera ronda con Strider. Sin embargo, eso no significa que su valor sea similar.
Según la estimación de prácticamente cualquier sistema de proyección, Strider es fácilmente el mejor lanzador de fantasía de este año, una combinación de producción y fiabilidad que ningún otro lanzador puede igualar. ¿Estará mejor valorado que la mayoría de los bates de la primera ronda al final de la temporada? No lo sé, probablemente no; según la herramienta Player Rater de Razzball, fue el noveno mejor jugador de fantasía de la temporada pasada. Pero, ¿proporcionará una ventaja como SP1 similar a la diferencia entre Ronald Acuña y cualquier otro bateador?
Ya lo elegí en el cuarto lugar general este año, así que, sí, ése es el argumento que estoy esgrimiendo. – Nathan Grimm
Gavin Williams, Guardianes de Cleveland
No tengo ninguna razón matona por qué debes estar apuntando a Gavin Williams en tu draft. De verdad no sé por qué es el lanzador número 65 seleccionado en general en ligas de campeones de draft y las de 15 equipos, y su ADP es el 159 en general.
Es una selección de primera ronda en 2021, alguien que hizo un trabajo rápido de las ligas menores, se graduó a Cleveland y lanzó a un ERA de 3.29 con un ponche por entrada en 82 innings. Como se mencionó en este espacio, Chris Antonetti cree que obtendrá una temporada completa de Williams. Hay cosas que son problemas, supongo: superó su ERA por cerca de dos carreras, y el control no fue tan fino en las Grandes Ligas como lo fue viniendo a través del sistema de Cleveland. Pero por Dios, ¡tiene 24 años y fue su primera experiencia en Grandes Ligas! Existía la preocupación de que no fuera capaz de utilizar lanzamientos más allá de su bola rápida y su slider con eficacia, y al principio así fue. Pero en septiembre, aunque la muestra es pequeña, los bateadores lograron un promedio de .167 contra su cambio y .000 contra su curva, lo que me parece algo bueno. ¿Prueba esto que es un lanzador de cuatro lanzamientos inmediatamente? No. ¿Es una bandera roja para ponerlo por debajo de Carlos Rodon en el ADP? Para mí, no.
Esa brecha DRA/ERA tiene a Williams devolviendo cerca de la mitad en PECOTA y muchos otros sistemas de proyección, poniendo su resultado medio en alrededor de 4.30-4.40 ERA con muchos ponches. Es un jugador top-150 si no supera la proyección media.
Pero creo que lo hará. Una vez más, las estadísticas de los entrenamientos de primavera no tienen sentido, pero fíjense en cómo registró estos cuatro ponches el 29 de febrero. Bola rápida, slider, dentro o fuera, diestro o zurdo: no importó. ¿Realmente Gavin Williams te parece un lanzador abridor mediocre en este momento? – Howard Megdal
Yoshinobu Yamamoto, Dodgers de Los Ángeles
Debo señalar desde el principio que elegí a Yamamoto para este espacio hace unas semanas, antes de que su ADP empezara a subir. En las ligas NFBC de enero, fue el undécimo abridor que salió del tablero. En febrero, fue el 10º. Hasta ahora, en la primera semana de marzo, ha sido el octavo abridor drafteado y el 34º jugador en total. Cuando alguien sale tan pronto en el draft, tu capacidad para incluirlo en tu plantilla puede depender en gran medida de tu posición en el draft.
Pero, venga, si tengo la oportunidad, quiero a este fulano.
Yamamoto tuvo problemas en su última salida de la Liga del Cactus, al menos desde el punto de vista de los resultados, ya que permitió cinco carreras con seis hits y tres bases por bolas en tres entradas. Sin embargo, si viste ese partido, habrás visto que la defensa que tenía detrás le falló, ya que los White Sox no precisamente escaldaron la bola del diestro. Ahora, es justo decir que la defensa de los Dodgers podría seguir siendo un eslabón débil, al menos en el cuadro interior, donde Max Muncy y Gavin Lux parecen inestables en el lado izquierdo y el ex jardinero Mookie Betts se encargará de la intermedia. Lux, sin embargo, ya no parece fijo en el puesto de parador en corto titular, ya que el defensivamente superior Miguel Rojas se perfila como alternativa.
En última instancia, la defensa menos que estelar que tiene detrás no es suficiente para alejarme de Yamamoto, ni tampoco lo es el hecho de que, como parte de una rotación de seis brazos, no va a tener la carga de trabajo de otros ases. Se trata de un tipo que tuvo un ERA microscópico de 1.16 y 176 ponches en 171 entradas en su última temporada en Japón y que sólo tiene 25 años. Las evaluaciones de los Dodgers tienen bien ganada la confianza de los gerentes de fantasía, y lo consideraron digno de un contrato de $325 millones de dólares porque esperan plenamente que su material excepcional funcione en los Estados Unidos. Contará con el apoyo de una ofensiva de otro mundo. Los aspectos positivos superan con creces cualquier crítica que se le pueda hacer, y yo estaría encantado de comenzar mi plantilla de jugadores de fantasía con Yamamoto. – Ryan Boyer
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