Dinero que no está muerto

Traducido por Pepe Latorre

Los zombis caminan entre ellos. A medida que los jugadores se preparan para esta segunda temporada marcada por la pandemia, algunos de ellos llaman la atención, no por lo que son, sino por lo que fueron y luego dejaron de ser. No hace mucho tiempo, cuando la sabermetría menos humana estuvo en su punto más alto, cuando veíamos a los peloteros como cosas poseídas por los equipos o elogiábamos las manipulaciones de las reglas financieras en beneficio de los propietarios, nos referíamos a ciertos contratos como “dinero muerto”. De hecho, ese tipo de expresiones no han desaparecido del todo. Sin embargo, su popularidad está cayendo, y no solo porque aquellos que cubren el juego están comenzando a ser conscientes de la manera en que usan sus palabras. Resulta que en el béisbol moderno el dinero muerto puede volver a la vida.

En términos generales, a PECOTA no le gustan los Cubs. Hay dudas sobre su cuerpo de lanzadores. Dudas que están muy bien fundadas. Sin embargo, PECOTA está loco por la ofensiva del equipo, en parte por la siguiente proyección:

Jason Heyward, percentil 50 de la proyección de PECOTA.

Temporada	PA	AVG	OBP	SLG	DRC+	WARP
2021	581	.251	.342	.404	105	1.8

(Nota: para comparación simple dejamos esto que se extrajo directamente del Baseball Prospectus 2021. Las proyecciones de PECOTA de Heyward, como las de muchos jugadores, pueden haber cambiado ligeramente desde entonces, pero ayuda tener un único punto de referencia común para la próxima cosa que estamos a punto de hacer).

No es que ilusione especialmente. De la misma manera que tampoco revivirá las esperanzas de Salón de la Fama de Heyward que ya fueron abandonadas hace mucho tiempo. Sin embargo, es una proyección sólida para un jugador que entra en su temporada de 31 años y en el sexto año de un contrato de ocho. Esto es especialmente cierto cuando uno lo compara con lo que dijo PECOTA sobre él en las últimas campañas.

Jason Heyward, percentil 50 de la proyección de PECOTA.

Temporada	PA	AVG	OBP	SLG	DRC+	WARP
2019	474	.252	.320	.378	92	1.7
2020	595	.251	.335	.398	96	1.5

Después de un par de actuaciones ofensivas horrorosas en sus dos primeras temporadas con los Cubs, Heyward se ganó el sambenito de fiasco. Su contrato, con seis años restantes, fue considerado como dinero muerto. Los Cubs llegaron incluso a reducir sus planes de gasto (aunque tal vez no sea cierto del todo) por los decepcionantes retornos que estaban obteniendo en la agencia libre.

Heyward, sin embargo, no se resignó. Ha mejorado su DRC+ en al menos ocho puntos en cada uno de los años en los que ha estado en los Cubs. Ha mejorado sus tendencias en el cajón, siendo capaz de mantener un excelente dominio de la zona de strike y con un porcentaje de contactos superior al promedio. Mientras tanto, ha cuidado su cuerpo, sigue siendo un excelente defensor en el jardín derecho y es un compañero ejemplar.

Por muy bonita que sea esta historia está muy lejos de aquella que ejemplifica como poco el dinero no muerto en el jardín derecho de un equipo aspirante de la Liga Nacional. Ese honor le corresponde a Wil Myers de los Padres.

Wil Myers, percentil 50 de la proyección de PECOTA.

Temporada	PA	AVG	OBP	SLG	DRC+	WARP
2021	554	.240	.319	.451	112	3.2

Myers solo tiene 30 años y a diferencia de Heyward no llegó a las Grandes Ligas ni a la agencia libre siendo escandalosamente joven. En enero de 2017 firmó uno de esos acuerdos que se supone que son más o menos infalibles. Fue un acuerdo muy cargado en la parte final del mismo, pero que le daba a San Diego hasta cuatro años adicionales de control sobre un jugador que esperaban que fuera una pieza fundamental. El problema fue que ni en 2018 ni en 2019 fue ese tipo de jugador. Se la pegó. Mientras tanto, la parte verdaderamente elevada de su contrato entró en vigor en 2020. Esto es lo que dijo PECOTA sobre Myers en los últimos dos años.

Wil Myers, percentil 50 de la proyección de PECOTA.

Temporada	PA	AVG	OBP	SLG	DRC+	WARP
2019	576	.240	.321	.415	101	-0.2
2020	595	.230	.313	.413	94	0.9

Al igual que Heyward, Myers registra datos de bateo sustancialmente mejores que respaldan su excelente desempeño en 2020 y que contradicen las acusaciones de que solo tuvo suerte. Al mismo tiempo, los Padres pueden justificar esta resurrección en un cuerpo técnico renovado y un cambio en su enfoque: enfocar el desarrollo de los jugadores en las Grandes Ligas como un proceso continuo. Habría resultado importante la incorporación de Ryan Flaherty a su cuerpo técnico como scout avanzado y entrenador de desarrollo, así como el mayor protagonismo cedido a Keith Werman y Peter Summerville, dos entrenadores jóvenes centrados en el desarrollo. Esto permitió al equipo dedicar más recursos a proyectos como la recuperación de Myers, los ajustes de Eric Hosmer y la puesta a punto de una sorpresa como Jake Cronenworth.

Se podrían contar historias estadístico-económicas similares sobre Hosmer, A.J. Pollock y un puñado más de Grandes Ligas. Todas nos llevan a las mismas conclusiones. A un giro pernicioso del capitalismo y de la ortodoxia sabermétrica. Decir que los malos contratos eran dinero muerto y que los equipos malgastaban dinero al seguir apegados al jugador es una simplificación excesiva. Y solo lleva a perder una gran oportunidad. Los peloteros no son dados, por lo que la falacia del jugador (o de Montecarlo) no se aplica a ellos. Si un equipo hace su trabajo antes de comprometerse con un jugador, asegurándose de que el jugador es el tipo de persona que responderá y mostrará resistencia si las cosas van mal, no es necesario que se rindan ante las primeras contrariedades. Si una organización que ya ha invertido mucho en un jugador que ahora está sumido en una muy mala racha, hay más y mejores alternativas que mirar hacia otro lado: pueden invertir más en el desarrollo, la instrucción y la comodidad de ese jugador, incluso si es un veterano.

Justin Upton pegó dos jonrones imponentes en el juego que los Angels disputaron en la Cactus League la tarde del lunes. Después de un 2020 miserable, todavía le deben 51 millones de dólares hasta 2022. El nuevo gerente general, Perry Minasian, hizo un buen movimiento al incorporar a Dexter Fowler como seguro. Además, los novatos Jo Adell y Brandon Marsh esperan entre bastidores. Sin embargo, antes de continuar, es posible que los Angels quieran probar un poco más con Upton y ver si puede demostrar que el talento, la inteligencia y la pasión que lo llevaron hasta aquí permitirán un resurgimiento (técnicamente) improbable. La nueva repetición de sabermetrics dice que las probabilidades son más de lo que parece.