Traducido por Marco Gámez
Sabemos que usar sustancias pegajosas mejora el agarre, lo que aumenta la capacidad del lanzador para hacer girar la pelota y que sus lanzamientos se muevan. Sabemos que, en general, los lanzadores dejaron de usar esas sustancias entre mayo y junio, ya que MLB decidió hacer cumplir sus reglas contra sustancias extrañas y, como resultado, esas revoluciones se redujeron radicalmente.
Pero se podría esperar que la aplicación de un compuesto pegajoso a la superficie de la pelota afecte su aerodinámica de otras maneras. Al examinar el experimento más drástico con sustancias pegajosas hasta el momento (el abandono total de ellas después de la prohibición de la liga en junio) se observa que hay un efecto en la resistencia al aire de la pelota, el cual podría resultar útil para detectar trampas en el futuro.
Aunque la atención se ha centrado, de manera acertada, en las revoluciones y los efectos sobre ellas desde la prohibición, Statcast recopila una gran cantidad de información sobre el recorrido de los lanzamientos que envían los lanzadores ahora sin sustancias pegajosas. Como era de esperarse, el movimiento también ha bajado, y la semana pasada descubrí que la velocidad entre los lanzadores que perdieron RPM también ha bajado. Pero otra de las métricas más importantes es el arrastre o la resistencia al aire en el campo de juego, que se calcula a partir de cuánto se ralentiza el lanzamiento en su recorrido desde la mano del lanzador hasta el plato.
La complejidad aquí es que la resistencia depende, en parte, del giro. Una bola con más revoluciones por minuto desplazará más aire a su alrededor, lo que hará que disminuya un poco más su velocidad en el camino hacia el plato (aunque no lo suficiente como para que el bateador lo note o le dé más tiempo para reaccionar). Dado que las sustancias pegajosas aumentan las revoluciones, para determinar cómo afectan a la resistencia, debemos eliminar el impacto de las rotaciones adicionales. Hice esto con una variedad de modelos diferentes, incluso teniendo en cuenta la densidad del aire (que se ve afectada por la temperatura y la altitud), pero todos produjeron resultados similares.
En general, parece que las sustancias pegajosas producen más resistencia al aire en el campo de juego, incluso más de lo esperado considerando las revoluciones por minuto. Puedes ver esto muy claramente a lo largo de toda la liga, dividiendo los datos de 2021 de Statcast en dos eras: la época de las sustancias pegajosas (antes del 15 de mayo) y la época post sustancias pegajosas (después del 15 de mayo).
Este gráfico muestra la resistencia al aire medida (eje y) en función de las revoluciones de la pelota (eje x) para esas dos eras. La línea superior es la era de la sustancia pegajosa, y la línea inferior es lo que sucedió cuando los lanzadores dejaron de usar su Pegamento de Araña (o se lo quitaron de los dedos, presumiblemente). Dos cosas son diferentes: primero, la resistencia es universalmente menor después de la prohibición. En segundo lugar, y menos obvio, la pendiente de la línea que une las revoluciones y la resistencia también es menor en los meses posteriores a la prohibición.
Si has seguido lo mucho que se ha escrito sobre cambios en la pelota de beisbol en los últimos cinco años, sabrás que la resistencia al aire de la pelota tiende a fluctuar de un mes a otro. Esos altibajos elevaron las tasas de jonrones con ellos y produjeron la era de jonrones más alta en la historia de la liga. Pero no creo que la caída de la resistencia aerodinámica desde mayo sea producto de una pelota alterada, o al menos, no de una pelota que se fabricó de manera diferente, sino más bien una pelota con un pegamento exterior diferente.
La razón es que la diferencia en la resistencia al aire se debe en gran parte a los lanzadores que han sufrido las mayores caídas de RPM. Existe una correlación significativa entre la magnitud de la disminución de RPM de la bola rápida de un lanzador (eje x) y la caída en la resistencia del aire de ese lanzador (eje y), incluso después de tener en cuenta el cambio en las revoluciones.
Vale la pena señalar aquí que esta correlación no existía en 2017 o 2018, años en los que el uso de sustancias pegajosas de alto rendimiento como el Pegamento de Araña aún estaba en su infancia. Esta relación entre la pérdida de revoluciones y la pérdida de resistencia al aire es un fenómeno nuevo que apareció a partir de 2019, que probablemente no sea una coincidencia, cuando las tasas de revoluciones comenzaron realmente a aumentar.
La conclusión tentativa que saco es que las sustancias pegajosas, al menos las que se usan en los últimos años, hacen algo que imita o parece un cambio de resistencia al aire en el campo de juego. Sin embargo, ese efecto no parece propagarse a ningún cambio en el recorrido de la bola bateada, al menos en promedio. Los lanzadores que muestran una disminución en la resistencia o cambios en las revoluciones de la bola rápida después de la prohibición no han recibido más jonrones o batazos elevados de mayor distancia de lo esperado. Un puñado de lanzadores han mostrado desviaciones bastante grandes y estadísticamente significativas en la distancia de los batazos elevados (más de cuatro pies) (1.22 m), pero solo algunos de ellos tuvieron grandes caídas de revoluciones, otros no en absoluto.
Uno de los aspectos más frustrantes de la historia de las sustancias pegajosas es que no estamos tratando con una mezcla particular de químicos, sino más bien con una plétora de compuestos, desde pegamentos de alto rendimiento hasta pegamentos fabricados en el sótano de la casa de los lanzadores para su uso particular. Aunque todas estas sustancias deberían compartir algunas propiedades similares, es decir, mucha adherencia entre la piel y la pelota, no necesariamente todas impactarían el vuelo de la pelota de la misma manera. Pero el hecho de que los lanzadores que perdieron las revoluciones después de la prohibición también, en promedio, perdieron el coeficiente de resistencia al aire sugiere que hay algunos puntos en común, y nos da otro indicador estadístico para sugerir quién está aumentando las revoluciones de sus pitcheos y quién acaba de empezar a mejorar.
Thank you for reading
This is a free article. If you enjoyed it, consider subscribing to Baseball Prospectus. Subscriptions support ongoing public baseball research and analysis in an increasingly proprietary environment.
Subscribe now