Traducido por José M. Hernández Lagunes
Andrés Muñoz, Seattle Mariners
Muñoz irrumpió en la MLB con los Padres siendo un joven de 20 años en 2019 lanzando gas de triple dígito. Luego, se reventó el brazo al año siguiente y se sometió a la cirugía de Tommy John en marzo de 2020. En la fecha límite de intercambios de ese año, los Padres lo enviaron a los Mariners en el trueque por Austin Nola. (Vaya que los Mariners hicieron un gran truque.) Desde entonces, hubo que esperar a que Muñoz se recuperara. Ha merecido la pena.
Después de un comienzo difícil el año pasado, Muñoz se vio eléctrico, mostrando un slider intocable alcanzando 140 kph y su característica bola rápida superando los 160 kph. En sus últimos 42 partidos, sólo permitió carreras en tres, lo que le llevó a un increíble ERA de 1.21, un WHIP de 0.67 y un porcentaje de ponches del 43.8%. Durante el año, su ERA de 2.36 sólo fue inferior al de Edwin Díaz y Spencer Strider. En particular, el comando del slider de Muñoz fue excepcional, incluyendo un notable 71.6% de strikes. Podría decirse que fue el mejor relevista del béisbol por momentos el año pasado.
A pesar de todo eso, Muñoz tiene un ADP de décima ronda (147) debido a la presencia de Paul Sewald, quien se está recuperando de cirugías de temporada invernal y con un BABIP insosteniblemente bajo el año pasado (.158). (De hecho, fue el BABIP más bajo de la MLB.) Los Mariners no han sido tímidos anteriormente a la hora de recurrir a un joven relevista de élite (Edwin Díaz) como su cerrador. Es sólo cuestión de tiempo que Muñoz suplante a Sewald. Si lo hace, Muñoz se convertirá inmediatamente en uno de los cinco mejores cerradores.—Jesse Roche
Pete Fairbanks, Tampa Bay Rays
Prometo que tenía el nombre de Fairbanks para escribir en este espacio antes de que empezara a dispararse en las listas de drafts recientemente: en 27 drafts de febrero en el sitio web de la NFBC, Fairbanks tiene un ADP de 153.74, comparado con un ADP de 199.74 en 27 drafts de diciembre. Los drafteadores están viendo lo mismo que yo: este lanzador de 29 años tiene unas habilidades increíbles y una posición más fuerte de lo esperado para el puesto de cerrador en Tampa.
Abordemos primero lo segundo. Los Rays tienen la reputación de ser un equipo al que no le gusta nombrar a un cerrador, pero la mejor descripción es que son una organización con visión de futuro que no tiene miedo de romper con las normas del béisbol si la situación lo requiere. Sin embargo, eso no significa que no hayan tenido cerradores tradicionales en los últimos años. Desde que Kevin Cash asumió el cargo de mánager de los Rays en 2015, esta es la lista de los principales cerradores del equipo en cada temporada:
- 2015: Brad Boxberger, 41
- 2016: Alex Colomé, 37
- 2017: Alex Colomé, 47
- 2018: Sergio Romo, 25 (Colomé tuvo 11 salvamentos en los primeros 48 partidos del equipo antes de ser traspasado a los Mariners el 25 de mayo)
- 2019: Emilio Pagán, 20
- 2020: Nick Anderson, 6 (temporada de 60 partidos)
- 2021: Diego Castillo, 14 (Castillo fue traspasado a los Mariners el 29 de julio; Andrew Kittredge salvó seis partidos en los últimos dos meses)
- 2022: Fairbanks/Jason Adam, 8 cada uno
El punto que quiero resaltar es que Cash no ha evitado utilizar un cerrador fijo cuando ha surgido uno, y en los años en los que no ha habido un tipo de más de 20 salvamentos, normalmente ha habido una buena explicación del porqué. Volviendo a Fairbanks: el diestro regresó a mediados de julio de un desgarro parcial del músculo lateral derecho sufrido en primavera, y a partir de ese momento superó a Adam en ocho salvamentos por cinco en la recta final. También es digna de mención la extensión de tres años y $12 millones de dólares que Fairbanks firmó el mes pasado, eliminando cualquier preocupación de uso relacionada con el arbitraje.
Súmalo todo y creo que Fairbanks es un relevista de alta habilidad—ni siquiera hablé de su loquísimo porcentaje de ponches del 43.7% o el porcentaje de strikes abanicados del 17% en 24 entradas el año pasado—que es una gran apuesta para liderar a los Rays en salvamentos en 2023. Muéstrame dónde firmar.—Nathan Grimm
Clay Holmes, New York Yankees
Aunque se ha hablado mucho de la situación del cerrador en este equipo de Nueva York, Holmes cuenta con la confianza de su mánager. Aaron Boone lo ha mencionado como la principal opción para cerrar los juegos, lo que debería darnos cierta tranquilidad… al menos para el comienzo de la temporada.
Holmes ha demostrado ser uno de los mejores relevistas del juego, terminando la temporada 2022 con un ERA de 2.54, un WHIP de 1.02, 65 ponches, siete victorias y 20 salvamentos en sólo 63 y 2/3 entradas lanzadas. Tiene un sinker de élite que alcanza las 97 mph (156kph), y los bateadores tienen un promedio de .256 contra él, lo que lo convierte en un rival muy difícil para los rivales. La ofensiva de los Yankees, liderada por Aaron Judge, proporcionará suficiente apoyo de carreras, y la rotación inicial con Gerrit Cole, Carlos Rodón y Néstor Cortés pondrá al equipo en posición de ganar partidos. Tendrá muchas oportunidades de ganarse esos molestos salvamentos.
Los problemas de Brick House a finales de la temporada pasada no deberían disuadir a los mánagers de fantasía de tenerlo en cuenta. Se recuperó bien de sus lesiones de espalda y hombro, y terminó su campaña de 2022 con ocho entradas sin anotaciones en la postemporada, demostrando su capacidad para recuperarse de la adversidad. Sus actuaciones en roles de alto riesgo y en postemporada demuestran que puede hacer los ajustes necesarios para mejorar su juego.
Profundizando un poco más en sus métricas, su K-BB% (porcentaje de strikeouts menos bases por bolas) fue un poco decepcionante, con 17.3%, pero podría ser engañoso, ya que todavía tenía un muy fuerte CSW% (porcentaje de strikes cantados más abanicadas) del 30.2%. Consiguió que los bateadores abanicaran y fallaran o aceptaran los strikes en un alto porcentaje de sus lanzamientos, lo que le sitúa al mismo nivel que Emmanuel Clase y Félix Bautista.
La verdadera razón por la que su K-BB% es engañoso reside en otra métrica: gracias a su sinker, su GB% (porcentaje de roletazos) fue de un asombroso 75.8%. Es una cifra increíblemente alta: tan alta, que lideró a todos los relevistas con una cómoda ventaja de 10 puntos sobre el segundo clasificado, Andre Pallante. Lo que esto significa para Holmes es que incluso cuando no está ponchando a los bateadores de una manera tan extraordinaria como los mejores de la categoría, no necesita depender de eso; puede inducir muchas pelotas bateadas de mala probabilidad que le dan buenos resultados.
Por último, vale la pena señalar que Holmes tuvo un fuerte porcentaje de abanicadas contra su segundo mejor lanzamiento, el slider, con una tasa del 42.9%. La capacidad de generar abanicadas en un lanzamiento en particular es un arma valiosa para cualquier lanzador, y estuvo a la par con la de Emmanuel Clase y más alta que la de Jordan Romano, ambos de los cuales van mucho antes en los drafts por ADP.
Holmes cumple con la mayoría de los requisitos para ser uno de los mejores relevistas: juega para un equipo ganador, tiene una potente bola rápida, cuenta con un gran lanzamiento secundario e induce una gran cantidad de eventos de bajo daño, como roletazos al cuadro. De él depende mantener su puesto, pero hay muchas posibilidades de que lo consiga. En caso de que te hayas perdido a los relevistas más ricos, él es una opción perfectamente buena más adelante en el draft.—Carlos Marcano
Alex Lange, Detroit Tigers
Como “expertos” en béisbol de fantasía, se supone que nunca debemos admitir este tipo de cosas, pero hace dos meses ni siquiera sabía quién diablos era Alex Lange. Fue una selección de primera ronda (30ª general) por los Cubs en 2017 de la Universidad Estatal de Luisiana, lo que me dice que para alguien quien escribe regularmente sobre béisbol no presto tanta atención al draft como debería. Probablemente no recuerdo a Lange principalmente porque sus lanzamientos en ligas menores para los Cubs fueron pedestres (bola rápida inferior a 140 kph, curva potencial, no mucho más) y no parecía un futuro lanzador titular de fantasía.
Los Tigers adquirieron a Lange de Chicago como parte del intercambio por Nick Castellanos e inmediatamente lo trasladaron al bullpen. No fue una historia de éxito de la noche a la mañana—pasaron otros 21 meses antes de que hiciera su debut en Grandes Ligas con Detroit—pero Lange fue ascendiendo poco a poco en el bullpen de Detroit y ahora está listo para ser su cerrador el Día de Apertura.
Al igual que muchos lanzadores, Lange fue capaz de añadir velocidad a su bola rápida como relevista y ahora promedia 96 mph (154kph) con ella. Pero su éxito el año pasado se debió a que cambió de una bola de cuatro costuras a una bola rápida que se hunde y simplemente se apoyó más en esa bola curva y desarrolló la confianza para lanzarla en cualquier situación y lanzarla para strikes. Si hay un pero, es su control, pero eso es cierto para muchos lanzadores jóvenes y no estamos viendo a otro Carlos Mármol.
Más allá de los informes elogiosos sobre su material, las mejores razones para hacerse con Lange son que los Tigers generalmente prefieren un cerrador fijo y no hay nadie detrás de él que sea un fuerte competidor para el puesto. Lange es uno de los pocos relevistas baratos en los primeros drafts que parece estar asegurado para registrar salvamentos.—Mike Gianella
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