Traducido por Pepe Latorre
No hay nada como la sensación de euforia que se tiene al ver un jonrón bien pegado, al menos eso me parece a mí. Estos majestuosos batazos son pura felicidad, a menos, claro está, que seas el equipo contrario. Los jonrones tienen el honor de influir en el resultado de un juego más que cualquier otra acción que se produzca sobre el campo. También ocupan un lugar fundamental en el ámbito del béisbol de fantasía y tienen el potencial de impactar en tres quintas partes de todas las estadísticas ofensivas cuando también consideramos las carreras anotadas y las impulsadas.
Cómo de importantes pueden llegar a ser es una pregunta bastante intrigante. La respuesta varía dependiendo en gran medida del entorno de anotación de carreras de la temporada y de las pequeñas “mejoras” (guiño, guiño) que la MLB ocasionalmente hace sobre la pelota en sí misma. Sin embargo, podemos intentar proyectar cómo será el panorama durante la próxima temporada y cuál es la mejor manera de prepararnos para ello.
Antes de embarcarnos en este viaje examinaremos las tendencias recientes de bambinazos por año:
Aunque puede parecer que en 2023 hubo una bonanza de jonrones (con los Braves lográndolos a diario), la realidad es que estuvo lejos de la locura que vimos durante el período 2019-2021, como se puede ver en el gráfico (con la omisión de 2020, por supuesto).
Hubo un aumento bastante sustancial, de más del 13%, con respecto a la temporada 2022, que marcó el punto más bajo para esta categoría en las últimas siete temporadas completas. Esto significa que fuimos testigos de más de 700 bambinazos extra durante la temporada 2023 en comparación con el año anterior. Un aumento significativo que sirve como indicador inicial de algo que cambia mucho.
Ahora profundicemos y examinemos la cantidad de jugadores que lograron conectar 25 o más jonrones en una sola temporada durante este mismo período:
Pronto explicaré por qué utilizamos 25 como punto de corte, pero por ahora, centrémonos en los datos que tenemos a mano. Como puedes ver en la temporada 2023 se produjo un aumento en la cantidad de jugadores que entran en esta categoría, alineándose con el incremento general del 13%. Nos podemos acercar más:
Normalmente el punto óptimo en términos de producción de jonrones se encuentra en el rango de 25 a 31 por temporada. Por supuesto que existen excepciones a esta regla. En 2019 hubo un exceso bastante absurdo de bateadores en el rango de los 31 a los 38, una tendencia que persistió, aunque en menor medida, hasta 2021.
En 2022 las cosas volvieron al patrón más típico de 25 a 31, pero la temporada 2023 fue testigo de un aumento menor, pero significativo, dentro de este rango. Esto es muy importante para mí porque la consolidación de este rango puede establecer una base para el futuro. Si las condiciones ambientales y de equipamiento se mantienen constantes (sí, estoy pensando en la pelota), no hay razón para descartar la posibilidad de otro aumento en la próxima temporada. Incluso si es modesto, podría tener repercusiones en el largo plazo.
¿Qué tipo de repercusiones? Ahí es donde entra en escena el límite de los 25 jonrones que hemos mencionado más arriba.
El gráfico muestra la frecuencia de la cantidad total de jonrones para los 60 mejores equipos de esa categoría participantes en las ligas de 15 equipos del NFBC Main Event en 2023. Esto es lo que hizo que esos entrenadores fueran los mejores en esta estadística de entre los 795 equipos.
El equipo promedio en este nivel tuvo aproximadamente 332 jonrones y simplificando los movimientos durante la temporada, y como hay 14 posiciones ofensivas por roster de fantasía, obtenemos una contribución media de alrededor de 24 jonrones por jugador que redondeé a 25. Si quisieras calcular esta categoría este año, necesitabas esa cantidad promedio en cada pelotero de tu roster.
Por supuesto que tener a Matt Olson, Kyle Schwarber, Pete Alonso, Shohei Ohtani, Ronald Acuña Jr. o Marcell Ozuna (los únicos jugadores con 40 o más jonrones) en tu equipo podría haberte dado algo de margen. Pero si no fue el caso las cosas podrían haber sido algo más difíciles, ya que la mitad de los 60 mejores equipos en bambinazos también estuvieron entre los 60 primeros en carreras impulsadas y un tercio estuvieron entre los 60 primeros en carreras anotadas. Soy testigo directo de la importancia de golpear bombazos a lo Schwarber, el único equipo que tuve en el Main Event (compartido con un amigo, de hecho) esta temporada tenía a Schwarber, Acuña Jr. y Ozuna… y terminó siendo un equipo que batió récords. Puedes descubrir más sobre ese equipo en esta serie de artículos.
Entonces, ¿cómo van las cosas de cara a 2024? La mala noticia es que parece que tendrás que ir deliberadamente a por bateadores de poder, ya viste que podríamos haber alcanzado un nuevo piso en la categoría. Es posible que menos de 25 jonrones de promedio no vuelvan a funcionar.
¿Las buenas noticias? ¡Los bambinazos son divertidos! Tener muchos de ellos le traerá alegría y, con suerte, éxito.
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