¿Qué tan preparados están los lanzadores novatos?

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Traducido por Fernando Battaglini

A finales de mayo, hablé de cómo 2024 anunciaba el regreso del fregadero de la cocina. Más lanzadores estaban lanzando más tipos de lanzamientos de los que habíamos visto en mucho tiempo, ya que se comprometieron a tener tantas opciones en el montículo como pudieran reunir. Los equipos están aprovechando el desarrollo diferenciado de jugadores a un ritmo nunca antes visto, evolucionando desde una estructura organizacional que buscaba poner a los jugadores en un molde determinado a tomar lo que un jugador hace mejor o es más capaz de hacer y amplificarlo tanto como sea posible. Ese artículo de principios de temporada consideró a los lanzadores de toda la Liga siempre que cumplieran con ciertos requisitos de entradas. ¿Cómo, exactamente, se han acercado los equipos a sus lanzadores menos experimentados?

Se podría intuir que a los lanzadores novatos dominan menos lanzamientos. En este momento, los jugadores suelen realizar alrededor de 80 lanzamientos por salida en ligas menores. Difícilmente pasan cinco entradas con regularidad⁠, que es algo que nuestro equipo de análisis de prospectos notó en el Top 50 de mitad de temporada la semana pasada cuando habló del quinto mejor prospecto de lanzadores del juego, Noah Schultz. También es algo que notarás si escaneas los registros del juego, y es parte de la razón por la que fue tan importante cuando Drew Thorpe⁠—quien completó al menos cinco entradas en cada inicio en las menores esta temporada, exceptuando en una aparición⁠—finalmente obtuvo su llamada de junio. La tendencia de reducir el número de lanzamientos se traduce en que los muchachos no tienen tantas opciones para enfrentar la alineación. Después de todo, es un mundo de cinco entradas y salir del encuentro.

Podemos tener una idea de cuán preciso es esto al observar a todos los lanzadores novatos desde 2021 que lanzaron al menos 90 entradas, o 50 este año, lo que nos permite evitar a los relevistas puros. También nos permite considerar la primera generación de jugadores afectados por los cambios pospandémicos en el desarrollo, la contracción y las reglas de los jugadores. Usaremos la misma línea de base que usamos en mayo para determinar si un lanzamiento se considera parte del arsenal de un jugador: 10%. Eso nos deja con un grupo de 76 clasificados. Puedes verlos a todos aquí. Así es como se descomponen:

En un mundo donde los lanzadores de dos lanzamientos se han vuelto más relevantes, no lo son tanto cuando se trata de muchachos que irrumpen en la liga. Lo que los equipos parecen haber determinado (esto sería una extraña coincidencia en toda la liga durante varios años) es que los lanzadores más jóvenes necesitan más opciones. Por lo general, esto significa tener al menos tres o cuatro lanzamientos. Pueden tener una o dos ofertas realmente sólidas y uno o dos respaldos. Algunos de los ejemplos más ilustrativos son Keaton Winncon su sinker y slider este año, Taj Bradley con su splitter y curva el año pasado, o George Kirby con su sinker y curva en 2022.

La palabra “respaldo” en este contexto es complicada, porque se parece muchísimo a otra frase común: el lanzamiento de “muestra”, usado casi como un truco para mantener honestos a los bateadores. Pero cuando ocurre al menos el 10% de las veces, es diferente porque el lanzador prácticamente obliga al bateador a ser consciente de la existencia del lanzamiento. Es como un obstáculo en el camino. Puedes optar por verlo y respetarlo, o olvidarte de él y arriesgarte a estropear tu tren delantero. Este es el caso incluso si eso significa que el lanzamiento sigue siendo sólo una tercera oferta utilizada casi exclusivamente contra bateadores zurdos o derechos.

Por esas razones, en mayo reconocí que usar el 10% como límite para que un lanzamiento formara parte del repertorio de un lanzador era arbitrario pero deliberado. Los equipos, sin embargo, podrían tener en mente una tasa diferente para el valor de un lanzamiento en el repertorio de un abridor. Observe cómo cambia el gráfico al reducir el umbral del 10% al 8%.

La tasa de lanzadores novatos con al menos cuatro lanzamientos pasa del 49% de la población al 66%, y el mayor salto proviene de los lanzadores con los mayores arsenales. Si no vas a llegar tan pulido como sea posible, dada la forma en que la Liga ha impuesto barreras de desarrollo en ligas menores, probablemente sea mejor que llegues a las Mayores con la mayor cantidad de lanzamientos a pulir como sea posible.

Es posible que hayas atrapado a ese lanzador solitario de seis lanzamientos representado en la esquina inferior del segundo gráfico. Es Spencer Schwellenbach, el diestro de los Braves que casualmente fue llamado a las Mayores el mismo día que escribí sobre el regreso del fregadero de la cocina. Se une a solo otros seis lanzadores que han realizado seis lanzamientos al menos el 8% del tiempo en los últimos más de tres años: Kyle Gibson y Aaron Civale (2021), Jameson Taillon (2022), Jordan Lyles (2023) y Seth Lugo y Nick Martinez (este año). En primer lugar, una cosa es hacer más lanzamientos para llegar a las Grandes Ligas, pero los muchachos que hacen esa cantidad de lanzamientos, o cerca de ellos, brindan una gama cavernosa de resultados que a menudo van hacia el lado menos impresionante de las cosas. Algunos de ellos incluso ofrecen una amplia gama de resultados año tras año, como Lance Lynn o Yu Darvish.

Sin embargo, aquí es donde la cosa se vuelve absolutamente aterradora con Schwellenbach. Las métricas de calidad del discurso público ofrecen opiniones variadas sobre él. Stuff+ dice que su recta de cuatro costuras y su slider,  ya están por encima del promedio. Mientras tanto, Pitching Bot califica esos dos lanzamientos más su curva y su sinker como superiores al promedio. El PLV (valor de nivel del lanzamiento) de PitcherList dice que las características de su arsenal ya ocupan el puesto 30 en la liga. Pero, sobre todo, el propio PitchPro de BP dice que cada uno de sus seis lanzamientos ha generado un valor de carrera negativo, y sólo la forma de su cutter ha sido subóptima hasta ahora. No importa cuál sea su métrica preferida, tiene al menos dos lanzamientos de alta calidad y otras cuatro opciones que sabe usar, y esto es habiendo sido lanzador abridor de tiempo completo durante apenas un año.

Schwellenbach tiene la sexta mejor tasa de K-BB entre los novatos, impulsada por la segunda mejor tasa de bases por bolas (4.7%). Ocupa el puesto 33 entre los lanzadores que han lanzado al menos 50 entradas. Lanza el fregadero de la cocina sin importar la destreza del bateador, con cinco lanzamientos a derechos y seis a zurdos. Él es realmente el dado humano de seis caras. Estamos en medio de una racha en la que nuestro concepto del jugador de béisbol convencional se ve desafiado de manera regular, a medida que los bateadores combinan índices de contacto desastrosos con daños masivos y los lanzadores encuentran nuevas ofertas de primera línea con cambios de agarre notablemente sutiles. Y aun así, es un caso atípico como hemos visto.