Traducido por Pepe Latorre
Los Toronto Blue Jays le dan al receptor Alejandro Kirk una extensión de contrato de cinco años y $58 millones de dólares.
Los Blue Jays por fin se han decidido a darle una extensión multianual al ocasional bateador designado. Kirk ha pasado toda su carrera en Toronto y ha sufrido serias fluctuaciones de rendimiento durante su carrera en las Grandes Ligas. Hay más de una manera de parecerse a Vladimir Guerrero Jr., Kirk llevaba dos años fuera de la agencia libre, en lugar de uno solo, pero habría logrado un contrato muy lucrativo en el mercado… si hubiese logrado mostrar el mismo nivel que ha mostrado en algunos momentos de su carrera.
En 2022 Kirk consiguió su primera (y hasta la fecha única) aparición en el Juego de las Estrellas y al mismo tiempo se hacía con el Bate de Plata. Apareció en la caja de bateo 541 veces, una cifra enorme para un receptor, y conectó 14 cuadrangulares para lograr un DRC+ de 132 y un WARP de 5.2.
Un DRP de 11.4 lo convirtió en el cuarto mejor defensor de las Grandes Ligas, valor que se debe principalmente, pero no exclusivamente, al encuadre (también ha tenido un gran valor negando el pase a corredores que buscaban extra-bases). Desde esa temporada de ensueño las cosas no han ido por buen camino para Kirk. Ha perdido algo de valor defensivo, pero posiblemente lo más preocupante ha sido su falta de autoridad para batear la bola. Siempre ha sido algo inestable en este aspecto, pero últimamente el problema de poner casi la mitad de todas las pelotas bateadas en el suelo se ha agravado al no lograr enviar una proporción aceptable de las bolas restantes por encima de la cerca. Después de convertir en cuadrangulares el 15.4% y el 12.9% de las pelotas bateadas en 2021 y 2022, respectivamente, Kirk vio esas cifras retroceder al 6.9% y el 8.8% en las últimas temporadas. En consecuencia, apenas ha logrado cifras de ISO superiores a .100.
Afortunadamente, Kirk es un bateador paciente y ha recibido más bases por bolas que ponches a lo largo de su carrera (aunque tuvo sus peores índices personales de ponches y bases por bolas en 2024, excluyendo su muestra de nueve juegos en 2020). Este aspecto proporciona una base razonable para confiar en su rendimiento ofensivo y limita una posible regresión. A pesar de no superar la marca de .700 OPS en ninguna de las últimas dos temporadas, Kirk tuvo un DRC+ combinado de 109, precisamente la misma cifra que PECOTA le ha proyectado para esta campaña. Y aunque la defensa ha decaído en cada una de las últimas dos temporadas, el receptor tiene solo 26 años y no ha mostrado nada que indique un desgaste general de sus capacidades físicas o habilidades. Parece más que razonable aceptar la expectativa de PECOTA de que la situación se estabilizará en el frente defensivo. El rendimiento combinado como bateador y defensor no es precisamente digno del Juego de las Estrellas, pero una proyección de 3.1 WARP en el rol de receptor (que generalmente significa menos de 500 apariciones al plato, aunque Kirk logró calificar en 2022) rara vez decepciona… a menos que los aficionados sepan que es posible lograr más.
¿Es realmente posible algo más con Kirk? Es un poco difícil de precisar, sus percentiles promedio de velocidad de salida en las tres temporadas más recientes han sido 56, 19 y 78. Generalmente que un pelotero que ha experimentado una regresión en sus velocidades de salida, de tal manera que la suma de sus cifras de percentiles en las dos últimas temporadas no alcanzan las de la tercera campaña más reciente se tomaría como un mal presagio. Dado que el principal culpable de esta secuencia fue una caída en la velocidad de salida promedio en 2023, que se revirtió en gran medida el año pasado, es probable que Kirk haya vuelto al camino correcto. Si tiene la capacidad de volver a ser un bateador de nivel Bate de Plata es otra cuestión, pero Toronto no necesita que rinda como tal para seguir siendo un miembro importante de su lineup. Esta afirmación es particularmente cierta dado que el compromiso de Kirk no sacará exactamente a los Blue Jays de la puja por Guerrero Jr. durante el invierno.
Kirk ya estaba listo para ganar $4.6 millones en arbitraje esta temporada, en la que había sido su penúltima temporada bajo control del equipo, y eso no cambiará. Este acuerdo le exime de su última temporada de elegibilidad para arbitraje y le da a Toronto control durante los próximos cuatro años, lo que significa que Kirk volverá a ser elegible para la agencia libre después de la temporada 2030, a los 31 años. No era del todo probable que Kirk pudiera igualar su valor anual promedio de $11.8 millones en su última temporada de arbitraje, pero definitivamente podría haber tenido un mejor desempeño anual en la agencia libre, y será mucho más difícil para él asegurar un contrato a largo plazo al llegar a la agencia libre después de los 30. Gran parte de la ventaja financiera que podría haber obtenido al llegar a las Grandes Ligas se ha gastado en gran medida en este contrato, y es fácil imaginar que Kirk gane un poco más aquí. Es simplemente triste ver a uno de los compañeros de Kirk apostar por sí mismo y sentir que este contrato es un ejemplo de lo contrario.
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