Traducido por José M. Hernández Lagunes
Los Pittsburgh Pirates declinan la opción de equipo por $5.5 millones de dólares por el 3B Jung-ho Kang. [31 de octubre]
Los Pittsburgh Pirates firman al 3B Jung-ho Kang con un contrato de un año y $3 millones de dólares con incentivos valorados hasta los $2.5 millones más. [8 de noviembre]
Hace cuatro años, los Pirates firmaron a la estrella coreana Jung-ho Kang con un sorprendentemente barato contrato por cuatro años con una opción de equipo para el 2019. Los números de Kang en la liga coreana eran similares a los de Barry Bonds durante su época más productiva, pero firmó un contrato similar al de un jugador de banca, teóricamente porque nadie sabía si los números coreanos se traducirían bien al lenguaje de las Grandes Ligas. Si lo hicieron, y con una pequeña pausa por una fea lesión de rodilla, la cual le quitó la habilidad para fingir ser parador en corto, Kang parecía destacar como una estrella en la tercera base.
En julio de 2016, la policía de Chicago confirmó que Kang se encontraba siendo investigado por ataques sexuales. Dicha investigación se detuvo por falta de cooperación por parte de la víctima, pero un reporte a principios de año confirma que el caso sigue abierto.
Cualquier castigo que Kang pudo recibir por parte del Béisbol de Grandes Ligas debido al alegato de ataque sexual básicamente se borró este año. Pero en Seúl, Kang condujo ebrio, chocó un BMW prestado, huyó de la escena y mintió sobre el accidente a pesar de que existía evidencia en video. En ese momento se supo que Kang tenía dos convicciones penales por conducir en estado de ebriedad. Fue condenado nuevamente y sentenciado a dos años en prisión de manera suspendida.
Durante más de un año, Kang no pudo ingresar a los Estados Unidos, y por ende, confinado a la lista de jugadores restringidos. Básicamente, su incapacidad para obtener una visa le supuso una suspensión de facto. También se quedó fuera del equipo sudcoreano del Clásico Mundial de Béisbol de 2017. Tras perderse la temporada 2017 en su totalidad, intentó jugar pelota invernal en República Dominicana, donde duró menos de un mes antes de ser despedido. Creo que todos nos olvidamos de él y creímos que nunca volvería a aparecer en el radar.
Pero los Pirates nunca dejaron de apoyar públicamente a Kang, y sus esfuerzos le concedieron una visa de trabajo en abril. Aunque su regreso a las Ligas Mayores fue retrasado por lesiones en las muñecas y varias estancias en las ligas menores, los Pirates finalmente le activaron durante tres partidos al final de la temporada 2018.
Si Kang hubiese continuado su tórrido paso de 2015 y 2016, los Pirates alegremente hubieran tomado su opción para 2019 con una sonrisa, o le hubieran extendido el contrato en algún momento. Basta decir que en algún momento, Kang habría firmado un tremendo contratazo en ese lapso. Pero los Pirates le forzaron a regresar en 2019 por sólo $3 millones garantizados, un poquito más de la mitad del valor de su opción.
Desde el punto de vista de WAR/$, este es un cuadrangular para el equipo. En el peor de los casos, tienen a un jugador de banca en un contrato de un año jugando por el sueldo de un jugador de banca. Pero es perfectamente posible que su nivel sea de entre jugador del diario bueno y estrella. Si este es el caso, será un estupendo complemento o una gran mejora sobre Colin Moran por una pequeña cantidad de dinero para un equipo el cual perpetuamente trata de competir por la menor cantidad de dinero posible. Vale desde cualquier perspectiva, ¿no?
Desde luego, todo esto es posible gracias únicamente a que sobre el jugador pesa una acusación creíble de ataque sexual y de que tiene un largo historial de estrellar autos en estado etílico
Los Pirates están tomando una decisión consciente de sopesar lo malo y lo bueno para alinear a un pelotero estrella por debajo de su precio en el mercado. Valoraron su rentabilidad más que su percepción pública. Si ellos no lo hubiesen hecho, algún otro equipo seguro lo haría, y la historia avala la suposición. No me es posible analizar la transacción sin incluir estas feas verdades. Todo esto apesta, y seguirá apestando cuando en unas semanas o meses otro equipo haga lo mismo con otro pelotero.
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