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Image credit: Benny Sieu - USA TODAY Sports

Traducido por Marco Gámez

En esta serie, hemos examinado estadísticas de bateo y su relevancia para las ligas de fantasía y el béisbol en general. Hemos cubierto los siguientes temas del bateo hasta ahora:

Además, si deseas leer artículos de pitcheo, encontrarás enlaces a toda la serie en inglés aquí.

Hoy cubrimos una de las estadísticas más incomprendidas en el juego: promedio de bateo en bolas en juego (BABIP, por sus siglas en inglés). Debido a que a menudo se malinterpreta, los jugadores de fantasía lo usan mal con regularidad. Veamos cómo se calcula la estadística, qué otros factores contribuyen a los cambios en BABIP y cómo puede aplicar la estadística a su escuadrón de fantasía.

VISIÓN GENERAL

BABIP es una medida del porcentaje de bolas puestas en juego que se convierten en hits. Una pelota está en juego cuando la aparición al plato termina en algo diferente a un ponche, una base por bolas, un jonrón, una interferencia del receptor o un toque de sacrificio. Los sencillos, dobles, triples y outs que ocurren en el campo, por lo tanto, son los usados para calcular la estadística. La fórmula para BABIP es:

(Hits – Jonrones) / (AB – Ponches – Jonrones + Flies de Sacrificio)

En general, BABIP se ve afectado por tres variables: nivel de habilidad, suerte y defensa. Dado que los bateadores no tienen control sobre la defensa o la suerte, BABIP puede medir su nivel de habilidad. Sin embargo, BABIP tarda un tiempo relativamente largo en convertirse en una estadística confiable. Para los bateadores, se necesitan cerca de dos temporadas para estabilizarse. Por lo tanto, no debería molestarse en sacar conclusiones sobre las fluctuaciones de BABIP sobre un tamaño de muestra pequeño.

El promedio BABIP de la liga ha sido de .298 en las últimas 20 temporadas, y solo ha habido dos temporadas desde 2000 en las que estuvo por debajo de .295 (2003 y 2004). Lo más importante para recordar al considerar el BABIP de un bateador es que, en lugar de desplazarse hacia el promedio de la liga, un bateador tiende a desplazarse hacia su propio BABIP promedio de carrera.

Piénselo de esta manera: si un bateador tiene un BABIP de .285 en su carrera y comienza una temporada con un BABIP de .320 durante abril, el resultado más probable para ese bateador para el resto de la temporada será un BABIP de .285. No será el promedio de liga de .300 BABIP. De esta manera, BABIP sirve como una buena forma de considerar la sostenibilidad del rendimiento a corto plazo de un bateador. En el escenario anterior, el .320 BABIP del bateador está muy por encima de su nivel de habilidad profesional y es, por lo tanto, probablemente un producto de la suerte. Si ese mismo bateador tuviera un BABIP de .230 durante un mes, aún sería probable que tuviera un BABIP de .285 el resto del camino. Su pobre mes se atribuiría a la mala suerte. Un mes con buena o mala suerte no es tan sostenible como la marca BABIP de la carrera del bateador.

APLICANDO BABIP AL BÉISBOL FANTASÍA

Es probable que un jugador que batea más batazos en línea tenga un BABIP más alto, ya que ese tipo de bola bateada tiende a convertirse en hits con más frecuencia que los roletazos o los batazos elevados. Es muy inusual ver un BABIP de carrera por encima de .360, pero no es raro que los mejores bateadores del juego obtengan BABIP regularmente alrededor de .350, especialmente durante sus temporadas de producción pico.

En las últimas 20 temporadas, el mejor BABIP de por vida para un bateador con un mínimo de 3.000 apariciones en el plato es Christian Yelich, quien totaliza una marca de .358. Mike Trout exhibe .348, y Charlie Blackmon ha acumulado .336 en BABIP de por vida. Al otro extremo del espectro, encontrarás a Mike Moustakas con una carrera de .263 de BABIP, Carlos Santana con .268 y  Edwin Encarnación con .270. La conclusión es que incluso los bateadores con un BABIP relativamente bajo pueden producir un valor positivo en ligas de fantasía, siempre que bateen con poder.

Cuando ves a un bateador que registra un BABIP muy por encima o muy por debajo de su promedio de por vida, no puedes suponer que de repente adquirió (o perdió) algún grado de habilidad. BABIP toma más de 800 turnos al bate para estabilizarse, lo que equivale a aproximadamente dos temporadas de juego para un bateador. La explicación más probable para el cambio en BABIP es la variación aleatoria. Tus expectativas para el futuro deben ser que esos jugadores se desplacen hacia el BABIP de su carrera.

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