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Traducido por Pepe Latorre
ANTECEDENTES
En julio de 2013 los St. Louis Cardinals ficharon a Sandy Alcántara en la agencia libre internacional. Tenía 16 años. Debutó en la Liga Dominicana al año siguiente y desde entonces fue progresando con aplomo a través del sistema de Ligas Menores.
En 2016, Alcántara empezó a aparecer en las listas de los novatos más interesantes para las ligas de fantasía. Su porcentaje de ponches entre los niveles de A- y A+ se movió en el 25-29%. En 2017, con su llegada a Doble-A, se vio un pequeño retroceso en el rendimiento del derecho, aunque sus 125 ⅓ entradas con una efectividad de 4,31 impresionaron lo suficiente a la organización como para traerlo a las Mayores en septiembre. Lanzó 8 ⅓ entradas desde el bullpen y mostrando poco control. Alcántara demostró que tenía potencial para desarrollar un arsenal de cinco lanzamientos, pero el dominio de su recta necesitaba mejorar.
En diciembre de 2017, los Cardinals enviaron a Alcántara a los Miami Marlins como parte de un grupo de cuatro jugadores a cambio de Marcell Ozuna. Los Marlins mandaron al lanzador derecho a su filial de Triple-A para el comienzo de la temporada 2018. Durante sus 115 ⅓ entradas de esa campaña, Alcántara logró avances muy positivos. Redujo su tasa de bases por bolas al 7,9%, pero a cambio su porcentaje de ponches fue solo del 18,2%. Además, todavía tenía problemas para controlar su recta de cuatro costuras y su sinker. Sin embargo, tanto la apertura que hizo para los Marlins en junio de ese 2018, como las cinco aperturas que hizo cuando fue convocado nuevamente en septiembre, fueron lo suficientemente prometedoras como para que Alcántara fuera incluido en la rotación de cara al 2019.
2019 sirvió para demostrar su durabilidad. Hizo 32 aperturas y lanzó un total de 197 ⅓ entradas con una efectividad de 3,88 y un WHIP de 1,32. Una aproximación más detallada a su juego revela un buen crecimiento en su comando. En sus primeras 21 aperturas, lanzó 123 entradas con un ERA de 4,54 y permitió 16 cuadrangulares con una ratio de ponches por base por bolas de 89 a 60. Las últimas 11, sin embargo, fueron mucho mejores. En sus últimas 74 ⅓ entradas registró una efectividad de 2,78 con una proporción de ponches por base por bolas de 62 a 21, y permitió únicamente siete jonrones.
LO QUE FUE BIEN EN 2020
Alcántara fue el abridor en el Día de Apertura cuando la MLB finalmente echó a andar. Su temporada ha sido corta, 42 entradas, y aunque no conviene sacar demasiadas conclusiones de una muestra pequeña se ha visto un mejor control de su bola rápida y ha localizado más eficazmente sus lanzamientos.
Usó la sinker con más frecuencia que su bola de cuatro costuras, tanto contra diestros como contra zurdos. Emparejó su slider con su sinker para bateadores diestros. Contra zurdos prefirió su cambio y alguna que otra bola curva, junto con la sinker. Cambio y slider fueron sin ninguna duda sus mejores lanzamientos. Ambos acumularon tasas de abanico superiores al 35%.
En general, consiguió una ERA de 3,00 y un WHIP de 1,19 con 39 ponches y solo permitió cuatro cuadrangulares. Alcántara aumentó su tasa de ponches hasta el 22,7% y mantuvo sus bases por bolas en el 8,7%. También mostró mejoras algo más discretas en la velocidad y la rotación, al tiempo que redujo el ángulo de bateo de los rivales y los contactos duros. Solo cosas buenas.
Los Marlins ganaron cuatro de las cinco aperturas que Alcántara hizo en septiembre. El derecho jugó un papel importante en la llegada de los “Peces” a octubre. Ganó el primer partido del comodín ante los Cubs. Le dio a los Marlins 6 ⅔ entradas de tres hits, con una única carrera permitida, tres bases por bolas y cuatro ponches. El plan es que abra el primer juego de la serie Divisional de la Liga Nacional contra los Atlanta Braves.
LO QUE FUE MAL EN 2020
No hay muchas cosas que echarle en cara, pero no se puede dejar de lado el hecho de que fue uno de los muchos peloteros de los Marlins afectados por el COVID-19. Arrancó el Día de Apertura, pero no volvió a lanzar hasta el 30 de agosto. Esto le limitó a siete aperturas y 42 entradas en total.
Una muestra más grande podría haber cambiado el análisis tan optimista presentado hasta ahora. Sin embargo, los números que tenemos sugieren que la mejora en el comando y en el arsenal es real. Lo que Alcántara tiene que demostrar es que puede sostener esas mejoras durante toda una temporada, pero está en camino de ser una parte importante de la rotación de los Marlins y un activo sólido en las ligas de fantasía.
EL MÁS ALLÁ
El rol de Alcántara como estelar de los Marlins está en duda por la llegada de Sixto Sánchez. Aun así, el primero ya ha demostrado su durabilidad durante una temporada completa, mientras que el segundo tiene un largo camino por recorrer para ponerse al día. Alcántara podría ir asentándose como el as si firma una buena actuación en la Serie Divisional y en lo que venga después, si es que los Marlins avanzan.
El valor de Alcántara en las ligas de fantasía ha aumentado debido a su actuación en 2020. Ya se le ve como uno de los 40 mejores abridores de cara al 2021. Sin embargo, si termina lanzando bien y los Marlins avanzan más en la postemporada, Alcántara se colará en el Top 30. De cualquier manera, después de esta temporada, no volverá a ser la ganga que fue en los draft de 2020.
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